¡Primer día en el huerto de Serendipia! Nos levantamos con un clima muy poco habitual para nosotros. Un cielo cubierto de nubes, viento y mucha agua. ¡Pero nada iba a frenarnos en nuestro proyecto!, así que decidimos ponernos las botas de agua (o a falta de ellas, unas bolsas de plástico atadas a los zapatos…) y a embarrarse. Al llegar todos quedamos sorprendidos, ninguno podíamos imaginar que en un terreno tan cerca del centro de la ciudad se pudiese encontrar este oasis. Allí nos esperaba Raúl, el propietario del huerto para enseñarnos el terreno y mostrarnos todas las especies que en “Serendipia” se cultivan. Además nos explicó en qué consistirían las actividades que debíamos realizar.

Fotos: Ade y Merce

